
Miguel Rodero | La carretera provincial que une las localidades de Candelario y Béjar, catalogada como DSA-191, -la cual ya sufre habitualmente desprendimientos en dos de su puntos- muestra indicios de desprendimiento a la altura de la fábrica de El Navazo, donde no solo ha cedido ya parte del talud, sino que se aprecia una grieta en la pared que hace presagiar un derrumbe a no ser que se ponga remedio.
