Sólo una de las personas de las que fueron investigadas tras la denominada ‘Operación Milady’ , por las presuntas irregularidades en la expedición y uso de permisos de caza, continúa en el procedimiento penal que abrió el Juzgado de Instrucción de Piedrahita.
Las indagaciones se iniciaron hace algo más de un año y medio, cuando la Asociación de Propietarios de la Sierra de Gredos denunció una posible falsificación en el permiso para abatir a un ejemplar de cabra hispánica.
Sobre estos hechos ha recaído recientemente una resolución judicial que reduce la investigación a una sola persona, quedando sobreseídas las actuaciones contra otras, así como con las entidades insertas en dicha investigación.
De esta forma, continúan las acciones de la justicia respecto a esta persona que, en el momento de producirse la falsificación documental, se ocupaba de tramitar las licencias de caza.